Chapter 97
Resistiendo al amor de Mi Ex-Marido
CapÃtulo 97 Anna llegó ante ellos, con un tono profesional pero cortés, dijo a Bella: -Disculpa, señora Romero, necesito tomar prestado a Pedro por unos minutos -Te necesito en mi área, -Anna le dijo a Pedro, Pedro miró a Bella y murmuró suavemente: -Descansa aquà un rato, vendré por ti después.
Bella mantuvo una sonrisa educada y respondió: -Está bien.
Señor Romero, ve y ocupate, nosotros cuidaremos de la señora Romero, -dijo Clara.
Al escuchar la voz de Clara, Pedro mantuvo su expresión imperturbable, como si ya supiera que ella estaba alli, mientras que Anna parecÃa tener una pizca de duda en sus ojos.
Sin embargo, no se detuvieron mucho tiempo y siguieron a Pedro.
Aunque Pedro fue llamado por asuntos de trabajo, Bella todavÃa se sintió descuidada.
Aquellos que la habÃan envidiado instantes antes ahora la miraban con una mirada más significativa.
Pero Clara era una mujer capaz de mantener el control. -Los hombres están ocupados con cosas triviales, señora Romero, asà que descansa aquÃ.
-Y por cierto, señoras, mi empresa ha lanzado un nuevo sabor. Más tarde, enviaré algunas muestras para que todos prueben yden su opinión. También he preparado algunas cajas para llevar a casa, un pequeño gesto de atención, jespero que nocritiquen por la simplicidad de mi regalo! Al escuchar esto, nadie pudo rechazar la oferta.
Clara realmente era adecuada para el papel de mujer de negocios, decidida y sabÃa aprovechar las oportunidades.
Antes, Bella estaba preocupada de que no pudiera soportar las miradas extrañas o los murmullos a sus espaldas, pero Clara parecÃa no preocuparse por eso.
Ella consideraba esta situación como una oportunidad para aumentar su visibilidad, incluso llevando consigo una nueva lÃnea de licores como parte de una campaña publicitaria.
-Bella, ¡finalmente te encuentro! Una voz urgente llegó a ellos.
Bella se volvió para ver a Claudia apresurándose hacia ellos.
Después de la situación que habÃan tenido esa tarde, ¿cómo podÃa Claudia actuar como si nada. hubiera pasado? -¿Qué pasa? -Bella preguntó, mostrando impaciencia.
-Ven conmigo, -dijo Claudia sin rodeos, llevándola hacia un grupo de mujeres que parecÃan profesionales y con una presencia fuerte.
-Por favor, observen bien, jella es la verdadera señora Romero! Esa Anna no es más que una supervisora, ¿cómo pueden decir que será la futura esposa del CEO si no tienen idea?!-, exclamó Claudia, señalando a Bella.
+15 BONUS Las mujeres con etiquetas de marca observaron a Bella detenidamente. Incluso si es la esposa de Romero, ¿qué importa? Nunca hemos visto al señor Romero llevándola a ningún evento. ¡En cambio, la señorita GarcÃa siempre está con él en todas partes!
-Exactamente, el señor Romero trata muy bien a la señorita GarcÃa, la apoya completamente en su trabajo. Incluso la nombró directora del Banco de Inversión Rentilla para que se encargara. ¡Ese trato es inigualable!
Principalmente porque la señorita GarcÃa tiene la capacidad. Se graduó de una prestigiosa universidad en el extranjero tiene un historial brillante en la banca internacional. ¿Cómo puede esta mujer, que solo busca el placer, compararse con ella? Claudia defendió su postura con firmeza. -Bella obtuvo su certificación CFA durante la universidad. ¡No subestimen sus habilidades!
-Una certificación tan prestigiosa. ¡La mayorÃa de las personas la obtienen después de obtener titulos de posgrado! ¿Realmente la obtuvo durante la universidad? ¡Debe haberla comprado! -¿Qué sabe ella sobre los estados financieros? ¿O sobre el flujo de efectivo? ¿o incluso sobre las tendencias futuras en finanzas? -Ella sabe perfectamente, ¿piensan que obtuvo su certificación sin esfuerzo? -Claudia arrastró a Bella y dijo: ¡Diles lo que vales y haz que se den cuenta de tu talento! Después de tanto debate, Claudia finalmente recordó su presencia.
¿HabÃa sido un esfuerzo para elevarla o simplemente usar a esas mujeres para destacar la posición de Anna en el corazón de Pedro? Bella rió, Estas cosas se pueden encontrar en Google, no perderé tiempo explicándolas. Si quieren seguir discutiendo, adelante. Yoretiro.
-¡Te estás sintiendo culpable! ¡A pesar de ser una inútil, aún pretendes estar tranquila y elegante aquÃ! -dijo con desdén una mujer con evidentes signos de cirugÃa plástica.
X