Capítulo 196
Probando la Tentacion – la visita Nocturna del gerente General casto
CapÃtulo 196 Entonces, no me culpes
âEstá bien.â Myla no podÃa entenderlo, pero sentÃa que la secretaria Lynn debÃa
Tiene sus razones para decirlo.
ParecÃa inocente hasta el punto de ser un poco tonta delante de él. La secretaria Lynn suspiró para sus adentros.
¡No es de extrañar que el Sr. Moore tuviera que ocultarse tan profundamente antes! Si no hubiera acechado pacientemente a Myla, infiltrándose lentamente, tal vez antes de llegar a la etapa de confesión, su personalidad de conejo habrÃa desaparecido.
¡lejos!
Después de darle instrucciones, el secretario Lynn se fue y se llevó los materiales.
Myla de repente lo llamó. âPor cierto, este sábado quiero ir a hacerme un chequeo médico. ¿Hay algo programado para mÃ?â
TenÃa miedo de que cuando estuviera ocupada con el chequeo, la empresa
La llamarÃa de nuevo.
âPuedes irte; ¡no hay nada programado!â
â¿Qué ocurre?â La secretaria Lynn arqueó una ceja.
âNo, sólo un control médico de rutinaâ.
âOh, ese es un buen hábito. Dada la alta presión en nuestra lÃnea de trabajo y considerando todo lo que has pasado recientemente, es bueno tener un conocimiento regular de tu propia salud. Ahora que lo pienso, deberÃa
encuentre algo de tiempo para hacerse un chequeo tambiénâ. La secretaria Lynn sonrió y se fue con
los documentos.
Con su aprobación, Myla se atrevió a confirmar la hora concreta de control con el hospital.
En estos dÃas, estaba preparada para que tÃa Flo viniera en cualquier momento, ¡pero no habÃa señales de ello! Empezó a sospechar que podrÃa estar embarazada.
En la sala VIP del hospital, la señora Moore no habÃa dicho una palabra durante casi tres dÃas debido a un ataque de depresión.
¡La situación fue incluso peor de lo que esperaba el médico!
Shirton estaba preocupado, asà que tenÃa a alguien vigilándola las 24 horas del dÃa, los 7 dÃas de la semana. Ellos
Inspeccioné cada artÃculo en la sala, asegurándose de que no hubiera nada afilado que pudiera
CapÃtulo 196 Entonces, Donâ¦
porque el granero estaba presente
âKunck, toca.â
Llamaron a la puerta.
Shirton dijo âAdelanteâ y la puerta se abrió.
âSr. Moore
âHola, Shinon la miró y continuó mirando a su esposa dormida.
Grace dejó las frutas que habÃa traÃdo y pareció preocupada. â¿La señora Moore Mill no habla?â
âEsta vez, su amado hijo la estimuló repetidamente, fue a la sala de emergencias varias veces y ahora su condición es incluso peor que antesâ.
Shirton de repente levantó la vista. â¿Hablaste con esa mujer?â
Grace primero se sorprendió y luego suspiró. âLo hice. Le rogué que dejara a Fabián, pero ella se negó. Le conté la situación actual e incluso le rogué que aceptara que Fabián y yo fingiéramos ser una pareja para no ponerle las cosas difÃciles a Fabián. Pero⦠.ella era indiferente.â
â¿Ella no estuvo de acuerdo ni siquiera con tal pretensión?â
âProbablemente no. Después de todo, la que yace allà es la madre de Fabián, no la de ella. Solo que ella no se preocuparÃa ni se sentirÃa angustiadaâ.
Shirton entrecerró los ojos y en ellos brillaba un atisbo de crueldad endurecida y experimentada.
âEstá bien, entonces, no me culpes.â
Grace continuó: âSr. Moore, ¿qué planea hacer? Creo que no deberÃa actuar demasiado impulsivamente. Después de todo, Myla es la amada de Fabián. Si actúa contra ella, me temo que su relación padre-hijo con Fabián â¦â
â¡¿Tengo que tenerle miedo a una niña ahora?!â Shirton apretó los puños con frustración. âHe hablado y he dado un paso atrás. Te dejé ir y le advertÃ. Pero a ella no le importa.
¡en absoluto! ¿Crees que puedo aceptar dejarla casarse? ¿La familia Moore? ¡Eso pondrÃa patas arriba a la familia Moore!â.
âNo hay pero. ¡Como padre de Fabián, he sido lo suficientemente tolerante!â Shirton hizo una pausa y frunció el ceño. Tengo que actuar rápido, o si Myla queda embarazada, las cosas serán difÃciles de manejar.