Chapter Capítulo 274
La mamá de mi hijo será mi mujer
CapÃtulo 274 Cuando Hayley vio que Gregory accedÃa a que se quedara, se alegró mucho. ¡SÃ! ¡Estoy un paso más cerca del éxito!
âGreg, he comprado tus pasteles favoritos para ti. DeberÃas tomarte un descanso primero. Ven y prueba estos pasteles. Colocó los pasteles frente a Gregory, uno por uno.
Sin embargo, simplemente miró esos pasteles y no dijo nada. Luego, continuó recogiendo su violÃn ya que todo en lo que pensaba era en Tessa.
Le prometà a la señorita Tessa que la próxima vez que nos veamos dominaré esta pieza y la tocaré para ella. No tengo tiempo para comer esos pasteles ahora. Además, ¡los pasteles hechos por Miss Tessa son cien veces mejores que los pasteles comprados en la tienda!
La expresión facial de Hayley se puso rÃgida cuando vio que Gregory la estaba ignorando. Sin embargo, ella no dijo nada para reprenderlo. En lugar de eso, simplemente dijo en voz baja: âPondré el pastel aquÃ. ¿Qué quieres beber? Lo haré por ti.
Silencio. Gregory todavÃa la ignoraba.
âEntonces, te exprimiré un vaso de jugo de naranjaâ, informó Hayley después de un momento de silencio.
En los dÃas siguientes, ella venÃa a la mansión cada vez que Nicholas estaba fuera y se iba antes de que él regresara. Ella no perturbó en absoluto el tiempo de unión entre padre e hijo entre él y Gregory.
Además, Nicholas no sabÃa que Hayley visitaba su residencia a diario.
En la Residencia Gingham, Roselle miró al detective privado frente a ella. Apretando los dientes, aclaró: â¿Qué dijiste? Hayley, esa perra, ¿entra y sale de Dynasty Gardens todos los dÃas?
Nicholas no me permite acercarme a Gregory y Dynasty Gardens. Siempre sospeché que tenÃa algo con otras mujeres. He estado siguiendo a Tessa en secreto durante varios dÃas, pero no encontré nada. Entonces, comencé a monitorear la situación en Dynasty Gardens. Como era de esperar...
Apretó los dientes. â¡Hayley, esa perra! ¿Cree que es digna de Nicholas?
Sin embargo, ¿cómo deberÃa tratar con Hayley ahora? De repente, Roselle recordó la consecuencia que enfrentó su madre después de envenenar a Gregory. Ella no pudo evitar sonreÃr. Me temo que Hayley nunca podrá volver a acercarse a ese niño. Lo mejor serÃa que el niño muriera.
Roselle habÃa estado al acecho cerca de Dynasty Gardens durante unos dÃas. Finalmente, vio a un sirviente con sus ojos. Entonces, dio un paso adelante y preguntó: âDebes estar trabajando para los Sawyer, ¿verdad?â
Al escuchar eso, el sirviente asintió tÃmidamente. â¿Usted está?â
âNo importa quién soy, pero estoy aquà para darte dinero. Déjame preguntarte: ¿cuál es la relación entre el joven maestro Gregory y Hayley Stone? preguntó Roselle.
âLa señorita Stone trata bien al joven maestro Gregory. Sin embargo, él sigue ignorándola por alguna razónâ, dijo el sirviente.
Roselle asintió. âEn ese caso, aquà tienes 20.000. Hazme un favor: ayúdame a lastimar al niño e incriminar a Hayley por elloâ.
â¿No es eso dañar a la gente? N-No, no puedo.â La sirvienta siguió sacudiendo la cabeza con miedo.
Sin embargo, Roselle continuó tentando al sirviente con dinero. âDespués de que esto esté hecho, todavÃa tengo otros 100,000 para darteâ.
Después de pensarlo, el sirviente finalmente tomó el dinero.
Cha...
Cuando la sirvienta regresó a Dynasty Gardens, vio a Hayley y Gregory hablando en las escaleras. AsÃ, tomó la fruta de los otros sirvientes. Después de llevar las frutas arriba, el sirviente empujó a Hayley con fuerza.
â¡Ay! ¡Greg!â
Con ese fuerte empujón, Hayley perdió el control mientras caÃa hacia adelante y su cuerpo aterrizó directamente sobre Gregory. Inmediatamente, bajó rodando las escaleras desde el segundo piso hasta el primero y sangre roja comenzó a gotear de la cabeza de Gregory en cuestión de segundos.
Al escuchar el ruido, Andrew se apresuró a salir para comprobarlo. Los sirvientes estaban en caos, e inmediatamente gritó:
â¡Rápido! ¡Llama al 911! ¡Apuro!â
â¡Rápido! ¡Llama al Maestro Nicolás!â
⢠âJoven maestro... Joven maestro. Andrew le susurró a Gregory.
La situación era caótica en la mansión.
En ese momento, Nicholas acababa de recoger a Tessa porque planeaba llevarla a visitar a Gregory. Le habÃa prometido a Gregory que dejarÃa que se conocieran hoy.
Cuando recibió la llamada de su casa, la expresión facial de Nicholas dio un giro repentino. â¡Edward, ve al hospital! ¡Rápido!â
â¿Qué pasa?â Tessa preguntó mientras estaba un poco desconcertada.
âGreg está heridoâ, respondió Nicholas con voz profunda.
Al escuchar esto, Edward pisó el acelerador sin decir una palabra. Dio la vuelta al coche y condujo en dirección al hospital. Cuando llegaron al hospital, Gregory ya estaba en la sala de operaciones.
â¿Cómo está su condición?â preguntó Nicolás.
Andrew se sintió un poco culpable. âEl joven maestro acaba de ser enviado a la sala de operaciones. Derramó mucha sangreâ.