Capítulo 649
Niña en sus ojos Reina en su tierra (Jazmín) novela completa
CapÃtulo 649
âJazmin, no te vayas, todavÃa no hemos aclarado esto, jno pienses que puedes irte asi como asÃ!â
Al ver que Jazmin se iba, Greta rápidamente la siguió, extendiendo su mano para agarrar el brazo de JazmÃn.
JazmÃn estaba de espaldas a ella.
Pero era como si tuviera ojos en la nuca, apenas Greta extendió su mano, sin siquiera tocar su ropa, JazmÃn se giró rápidamente, atrapando su mano en el aire y deteniéndola.
En ese instante, el rostro de Greta se puso pálido, el dolor frunció su ceño.
SentÃa como si su muñeca estuviera a punto de romperse.
âDueleâ¦â El sudor frÃo brotó en su frente mientras luchaba sin éxito por liberar su máno del agarre de JazmÃn.
Pero no sirvió para nada.
Los dedos de JazmÃn estaban cono soldados a su muñeca, sin importar cuánto esfuerzo hiciera, no podÃa liberarse.
Sus ojos rápidamente se llenaron de lágrimas, se giró hacia JazmÃn con una mirada de súplica y debilidad: âHermano, me duele mucho.â
Bosco frunció el ceño, so acercó y dijo con voz grave: âJazmÃn, suéltala.â
JazmÃn levantó la vista, su rostro inexpresivo mirando hacia él, luego a Greta, quien tenÃa los ojos llenos de lágrimas y una expresión de lástima, soltó una risa frÃa y la soltó.
Sin usar mucha fuerza, vio como Greta tropezaba, tambaleándose hacia atrás un par de pasos antes de caer al suelo.
HabÃa pequeñas piedras en el suelo.
Al caer, una de sus manos aterrizó sobre las piedras, la palma delicada se perforó con las piedras afiladas, sangrando profusamente, con la sangre goteando al suelo.
Greta, sosteniendo su mano sangrante, comenzó a llorar de dolor.
âGreta.â Bosco cambió de expresión radicalmente, se acercó rápidamente, se agachó para ver su palma herida, su rostro mostrando una preocupación
1/2
16:12
profunda.
âHermano, realmente no sé qué hice mal.â Greta se lanzó al abrazo de Bosco, llorando desconsoladamente, â¿Por qué Jazmin me hizo esto? Mi mano duele
muchoâ¦â
La palma de Greta estaba cortada por las piedras afiladas.
La sangre roja brillante seguia cayendo al suelo desde su mano.
Su palma mostraba un rojo intenso, una vista bastante alarmante.
Probablemente por el shock y la pérdida de sangre, su rostro parecÃa aún más pálido que antes.
Sus ojos, hinchados y rojos de llorar, su rostro estaba mojado por las lágrimas.
Bosco siempre habÃa mimado a Greta, no soportaba verla sufrir ni el más mÃnimo
daño.
Al ver su mano en ese estado, llorando desconsoladamente en sus brazos, no pudo contener su ira, levantó la cabeza, sus ojos se teñÃan de rojo de furia hacia JazmÃn: âJazmÃn, si tienes algún problema, dirÃgete a mÃ, Greta es inocente.â
Desde el abrazo de Bosco, Greta levantó ligeramente la cabeza, sus ojos destilaban un desafÃo mientras mordÃa su labio.
Sus labios se movieron silenciosamente.
Como si le estuviera diciendo: JazmÃn, mira, Bosco se preocupa más por mÃ, yo soy su hermana, y tú, nada.
Desde el principio hasta el final, la cara de JazmÃn no mostraba ninguna expresión, observando a los hermanos abrazados, esbozó una sonrisa sin sonido.
Una táctica de incriminación tan trillada.
Y aún asÃ, Bosco lo creyó.
Frente a la mirada desafiante y orgullosa de Greta, JazmÃn entrecerró los ojos, sin decir una palabra, se adelantó y directamente arrastró a Greta fuera del abrazo de
Bosco.
Lo hizo con una rapidez asombrosa.
Greta ni siquiera tuvo tiempo de reaccionar antes de ser arrast
âJazmÃn, ¿qué estás haciendo?â Greta, enfrentándose a esos frÃos y oscuros ojos
de JazmÃn, la miraba aterrorizada.
212