Niña en sus ojos Reina en su tierra Capítulo 13
Niña en sus ojos Reina en su tierra (Jazmín) novela completa
CapÃtulo 13
Jazmin echó un vistazo a la tarjeta sobre la mesa pero no la tomo, Bajo la mirada sorprendida de todos, se levantó de la silla y dijo: âNo hace falta, pueden quedarse con la tarjeta.â
¿Qué vas a hacer, piensas llenarte con aire?â
*Tengo algo de plata, me alcanza. No voy a comer aire. Jazmin lanzó una mirada frÃa a los presentes, con una calma que desarmaba, y preguntó, â¿Ya terminaron? ¿Puedo irme?â
Se paró al lado de la mesa, metió las manos en los bolsillos y mostró esa actitud de vago sin remedio que tanto le molestaba a Magda. Magda, al vei esa actitud, se enfureció, agitò la mano como si espantara algo impuro: âSi te quieres ir, vete. Nadie te está obligando a quedarte.â
A Magda la criaron y educaron con mucha disciplina, y también era estricta con sus hijos.
Si Greta hubiera actuado como Jazmin, la habria castigado a palo hace tiempo.
Pero Jazminâ¦
Magda frunció el ceño con desprecio.
No esperaba que Jazmin llegara lejos, para decirlo de otra forma, no tenÃa la intención de preocuparse por ella en absoluto.
Ella era una comerciante.
Nunca desperdiciaba tiempo en personas o cosas innecesarias. En cuanto a JazmÃn, preferÃa no ocuparse de ella. Siempre y cuando no hiciera algo vergonzoso que manchara el nombre de la familia Alcaraz, no le importaba.
Jazmin no dijo nada más, giró sobre sus talones y se fue tranquilamente del comedor.
âGreta, tu hermana no ha recibido una buena educación desde pequeña, ya se torció y no hay vuelta atrás. Todas mis esperanzas están puestas en ti y tu hermano, asi que recuerda, no sigas el mal ejemplo de tu hermana y te eches a perder. Juega con tu hermano y evita juntarse con ella, ¿entendido?â Magda dijo con el ceño fruncido después de que Jazmin se fue.
Greta asintió con los labios apretados, la pura imagen de la obediencia: âSÃ, mamá. Entendido.â
Bosco, con los ojos medio cerrados, no dijo nada.
No le disgustaba Jazmin, pero tampoco tenÃa buenos sentimientos hacia ella.
Sin necesidad de que Magda se lo dijera, él también mantendrÃa su distancia.
No le importaba si eran o no de la misma sangre, su única hermana era Greta.
Magda y Santiago eran personas ocupadas, tomaron el desayuno y se marcharon de prisa.
Bosco estaba sentado en la planta baja esperando a alguien.
El joven, vestido con ropa de moda y una gorra negra, tenÃa rasgos finos como esculpidos, bellos sin excepción.
Al igual que Jazmin, tenÃa un rostro impresionantemente atractivo.
âHermano, Jazmin dijo que no quiere ir con nosotros, vámonos.â GrÄta bajó con su mochila rosada, se acercó a Bosco y se colgó cariñosamente de su brazo.
Bosco entrecerró los ojos: â¿No va con nosotros?â
âAsà es, dijo que ella sabe cómo llegar a la escuela, que no nos preocupemos por ella.â
Bosco recordó la personalidad de JazmÃn y soltó una risa burlona: âMejor asÃ.â
Si no fuera porque Magda se lo habÃa pedido, él no tendrÃa ningún interés en llevar a JazmÃn a la escuela.
Cuando Jazmin bajó con su mochila negra, Bosco y Greta ya se habÃan ido.
El chofer de la familia Alcaraz era Pol.
Al ver a JazmÃn con esa cara de no haber dormido bien y caminando más lento que un caracol, con toda la pinta de una joven en rebeldÃa, Pol se acercó con desagrado y dijo: âSeñorita JazmÃn, Bosco me pidió que la lleve a la escuela.â
Pol tenÃa una mala imagen de Jazmin.
Aunque él también pensaba que JazmÃn era muy guapa, no le gustaban las mujeres bonitas pero sin cerebro.
Preferia a alguien como la señorita Greta, inteligente, vivaz y bonita, que es querida por todos.
Jazmin levantó la cabeza perezosamente.
Miró a Pol que estaba claramente renuente y molesto, y extendió la mano diciendo: âDame las llaves del carro.â